viernes, 14 de noviembre de 2014



¿Es una sensación o realmente sucede? Somos víctimas, mientras, los delincuentes caminan muy sueltos de ropa y con la conciencia tranquila por la vida. 
Las leyes en vez de proteger a quienes laburamos para sacar el país adelante, protegen a los que lo están jodiendo y se llenan los bolsillos a nuestra costa.
Un secuestro virtual llegó a mi vida y desde ese momento, como cualquier ruptura, no volvés a recuperarte, ni a ser la misma persona que sos. Un simple llamado de teléfono implica temblar porque del otro lado puede haber un malparido que no tiene otra cosa que hacer que andar embromando a los en cierto modo intentamos llevar una vida normal. 
La persona que lo hizo, ni piensa que en esa casa puede existir una persona enferma, que ese tipo de noticias la puede matar o dejar mal.
Son infinitas las hipótesis que dan como resultado que fue una llamada al «boleo» y que por suerte, no llegó la sangre al rio. 
Ahora hay que tomar más recaudos y seguramente van a pagar justos por pecadores. La vida es así. Al menos en este país donde se insulta gratuitamente, se gana sueldos miserables y no se tiene el respeto por nada, ni nadie; entonces, cuando llegue el momento de realizar el deber ciudadano ¿democrático? de votar. Recién uno tiene que pensar qué gobernantes quiere para su país. Los que se postulan no son una clave para mejorar. Y mejor ni hablar de los que hoy ocupan cargos sin realizar nada para cambiar. Negar la realidad parece ser el secreto de estas personas. Muchos pasamos por situaciones de inseguridad. Entonces ¿crees que ellos lo van a solucionar? 


viernes, 22 de agosto de 2014



Me recomendaron este libro y no lo hizo cualquier persona, alguien que ama su profesión ─y no es un médico o médica─ encontrar el origen de las palabras en todos los sentidos, que explique con la sencillez y la humildad de tan pocos. Vamos a desmitificar a esos «matasanos» que se creen que saben mucho pero ni siquiera pueden escribir un certificado médico para presentar en el trabajo. El lenguaje, al menos el nuestro, es demasiado rico. Sería bueno comenzar a usarlo como corresponde.

viernes, 7 de marzo de 2014


Vamos a retomar un poco esto de escribir en el blog. Y quería hacer una breve reseña de un libro que compré en el verano. Me llamó la atención porque durante la cursada del taller de periodismo me tocó hacer una crónica y justo la autora escribe sobre esta temática.
A la autora no la conozco ni personalmente ni la escuché mencionar en ningún lado. Adriana Márquez es licenciada en Letras, estudió en la facultad de filosofía y letras de la Universidad de Buenos Aires. Algo que me llamó la atención en su breve biografía fue que coordinó capacitaciones en bibliotecología y dictando talleres literarios para niños y adultos.
¿En qué quedamos es Lic. en Letras o Lic. en Bibliotecología? No me quedó muy claro qué función realizaba dentro de las tareas que demanda ser justamente bibliotecario.
Si es la primera publicación que realiza, me resultó algo demasiado simple, quienes tengan horas de lecturas, lo leen en menos tiempo de lo pensado.
Postales, como menciona a cada crónica, si es que uno interpreta que esa imagen estática que ve estampada en un papel ilustrado es la historia que relata.
Más que crónicas me resultaron relatos de vidas. Lo que le pasó a fulana, un viaje en tren, la vida universitaria, etc.
Rescato los dos últimos relatos, llamaron la atención porque en Se mueren de otra cosa, se puede decir que es una crónica diaria. Lo que pensamos y lo que pasa actualmente. Crónica de mi muerte también es ameno y te deja pensando muchas cosas.

Para los que si tienen algún interés dejo los datos:

Adriana Márquez
De paso
Editorial Simurg
Año de edición: 2013
96 p.
Buenos Aires
Y si no lo aumentaron el precio era de $75,00.-

lunes, 20 de diciembre de 2010

Regalos navideños



Este fin de semana estuvimos tratando de ser creativas con lo que teníamos en casa. Aprovechando algunos retazos, restos de cinta nos pusimos manos a la obra y salió esto. Una linda bota navideña que está rellenada con golosinas.



Y por acá tenemos un estuche tejido al crochet con una cinta bastante gruesa, espero que sirva para portacosméticos, monedero o sea útil para algo. Siempre las mujeres vivimos metiendo nuestras cosas en estuches, monederos, sobres, en fin, para poner algo de orden en nuestras carteras, bolsos o mochilas.

martes, 23 de noviembre de 2010

Tejiendo algo


Un chalequito de lana para el futuro bebé que está por llegar en la Academia. Para cuando le vaya, seguramente ya es invierno. Ya voy recolectando varios sobrinos y sobrinas del corazón y trato en lo posible de tejerles algo a todos.


Bueno acá están algunos de los souvenir que realicé para entregar como recuerdo para el sábado próximo en la primera reunión de las Románticonas. Hay más de cuarenta llaveritos. Espero que les gusten a las noveleras románticas.

martes, 9 de noviembre de 2010

Jornadas Bibliotecas Digitales Universitarias


El jueves 4 y viernes 5 de noviembre pasado estuve asistiendo a las jornadas mencionadas en el título. Se realizaron en el aula magna de la facultad de medicina de la Universidad de Buenos Aires. Al menos pude entrar en ese lugar, aunque no me haya recibido como hubiera querido en otro momento de mi vida como kinesiologa.
Las jornadas estuvieron muy bien, el tema central eran las redes sociales. Hubieron participantes de Brasil y también de Uruguay.
Mi decepción fue que el edificio sigue casi igual que hace veinte años. Tan solo un ascensor para subir pisos superiores. Por suerte la biblioteca queda en el cuarto piso (aunque con entrepisos parece que fueran seis). Conocí otra parte de la biblioteca de medicina que obviamente está vedado para extraños, al menos que seas un médico con cierta experiencia y años.
Y la gran sorpresa al final de todo fue que una de las bibliotecarias cantó, por cierto muy bien. Y hubo sorteos donde fui la privilegiada en ganarme una lámina (que pienso enmarcar) con la imagen de un grabado de un esqueleto, con ese tipo de material estudiaban los futuros médicos allá por el 1890, calculo.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Tarde en el campo. Estancia, té y amigas.


¡Hola! Quería contarles que el sábado pasado fui de paseo hasta la localidad de Máximo Paz, pertenece al partido de Ezeiza. Allí se encuentra una estancia que se llama Villa María. La historia cuenta que perteneció a una familia adinerada de apellido Pereda. Es impresionantemente grande, la construcción que ven es la vivienda donde se hospedan aquellos afortunados que pasan el fin de semana. Es de estilo Tudor, la construyó según tengo entendido el arquitecto Alejandro Bustillo (el mismo que diseño el hotel Llao-Llao en Bariloche). Tardaron como siete años para finalizar ya que los elementos tanto de la construcción como la decoración fueron traidos de Europa. Al costado hay otra vivienda pero es más de estilo francés, allí se hospedan los empleados que atienden la hotelería. Como actividades para quienes pasen el día, más allá de comer las exquisiteces que ofrecen, tienen cabalgatas, caminatas por el amplio parque, en el verano hay piscinas, también paseos en sulky o carruajes. Hay canchas de tenis y también de polo.